Aquí tienes entrantes ricos, ricos para comenzar tu comida como debe ser. Es una de las partes del menú que nos dan más juego, y merece un pensamiento para equilibrar cada almuerzo o cena. Coordina el entrante con el segundo plato para que haya variedad nutricional, de sabores y de texturas.

¿Vas a hacer un asado con patatas? Empieza con una crema de verdura o una ensalada.

¿Has planeado un plato principal ligero, como un pescado al vapor? Puedes permitirte comenzar al estilo italiano, con una pasta, o sorprender con unas borecas o unas croquetitas.